Cuelguen a la Rora

Fin de año, época de recapitulaciones...

resúmenes variados: lo bueno, lo malo, lo peor... y así dependiendo de que tan malo haya sido tu año.

En mi caso, diría que fue un año de contradicciones: yo creo que fue el mejor año de mi vida... mis "amigos" creen que voy cuesta abajo en la rodada y que mi sana costumbre matinal del café "con punta", sólo evidencia aún más mi decadencia moral (zaaaaaaaaaaa). Mussho no?, dejémoslo ahí.

Alguien en la oficina propuso que escribiéramos nuestras buenas intenciones en un papelito y las colgáramos al árbol de navidad, así por efecto de la magia navideña éstas se harían realidad... jua jua jua, es tan tierno que capaz que sea cierto... Nooo, no era eso, así a fines del otro año veríamos si pudimos cumplir o no. Hmmm, eso me parece más sensato.

Yo parto.
Como decía el inolvidable Ron Damón: "Yo prometo que el próximo año el chavo no cometerá más travesuras..."